LA RECOLECCIÓN

Cómo Recolectar

La recolección de setas debe hacerse con conocimiento y respeto por el entorno. Es fundamental identificar correctamente las especies para evitar recolectar setas venenosas. Se recomienda usar una cesta que permita la dispersión de esporas mientras se camina por el bosque y cortar las setas sin dañar el micelio.

Normas imprescindibles para la recolección

Tal como se recoge en el Plan de Aprovechamiento y se estipula en las ordenanzas, la recolección de setas debe hacerse con conocimiento y respeto por el entorno.

El buen recolector de setas debe seguir el siguiente Decálogo:

No alteres la capa superficial del suelo, dañas al hongo y disminuyes su productividad.
No estropees o destroces setas que no conozcas o que no sean comestibles. Todas las setas desempeñan funciones importantes en la naturaleza y pueden ser de interés para otros recolectores.
Utiliza cestas o recipientes que permitan la aireación y la diseminación de esporas. Las bolsas de plástico aceleran su pudrición.
Evita recolectar ejemplares muy jóvenes (puedes confundirlos con otras especies tóxicas) o muy maduros (no son aptas para consumo y corres riesgo de confusión).
Identifica bien las setas. En caso de duda, evitar su consumo, muchas de las especies comestibles, tienen su doble tóxica.
No arrojes basura al monte y si puedes déjalo más limpio de lo que lo has encontrado.
No recolectes setas de zonas contaminadas son muy bioacumuladoras
Según la especie a recolectar es mejor cortar la base del pie (níscalo, setas de cardo, llanegas, negrillas y capuchinas), o recolectarlas enteras (boleto, marzuelo, amanita cesarea).
Limpia las setas en el monte; llevarás menos peso en la cesta y ayudaras a propagar los setales.
No abuses de su consumo; las setas tienen sustancias de difícil digestión y pueden provocar intolerancias y/o alergias.

Los tamaños mínimos de recolección se establecen de acuerdo con el siguiente detalle:

Grupo Boletus. Diámetro mínimo de 4 cm.
Resto de especies. Diámetro mínimo de 2 cm, a excepción de aquéllas que por sus características no alcancen esta dimensión en su estado normal.
Los carpóforos de la especie parasol o galamperna Macrolepiota procera deberán recolectarse con el sombrero extendido.
Amanita caesarea sólo cuando estén abiertos.